El papel de la legión en el desembarco de Alhucemas
Para Miguel Primo de Rivera, máximo arquitecto de las operaciones, la Legión (en este artículo me refiero indistintamente a la unidad como la Legión o como el Tercio) forma parte esencial de sus planes. Tanto más tras haber calibrado su estado de ánimo en el encuentro en Ben Tieb, en 19 de julio de 1924, donde la oposición al abandono del Protectorado había sido más que específica.
El desembarco de Alhucemas
España protagonizó el primer desembarco aeronaval con éxito realizado en la historia, que fue la revancha española tras el Desastre de Annual. El Desembarco de Alhucemas es comúnmente considerado como una de las operaciones de mayor éxito de la historia contemporánea del Ejército español.
Los héroes de Igueriben. El preludio Annual
¿Que cómo es el infierno? Que se lo pregunten a los de Igueriben. Nadie ha vuelto de las profundidades del Hades para dar testimonio del eterno castigo que depara Lucifer a los pecadores, pero si el inframundo es como lo pintan, en las jornadas previas a Annual hubo algunos españoles que tuvieron tiempo de mirar al Diablo a la cara antes de redimir sus almas.
Lepanto. La más alta ocasión que tuvieron los siglos
Mediado el siglo XVI, si algo estaba claro en la guerra total por el control del Mediterráneo que venían librando otomanos y españoles era que los primeros estaban a punto de ganarla. En tierra, la Sublime Puerta había sometido a su control la mayor parte de Hungría y seguía amenazando Viena; en el mar, los desastres hispánicos se habían sucedido en los años anteriores con una cadencia alarmante.
La batalla de Teruel
A finales del año 1937, el ejército franquista tenía ya controlada la práctica totalidad de la zona norte peninsular. Fruto de las campañas desarrolladas a lo largo del verano y el otoño, habían sido tomadas Vizcaya, Santander y Asturias. Ahora los planes de Franco eran dirigirse a Guadalajara, para desde allí lanzar el ataque definitivo sobre Madrid, dando así por finalizada la guerra.
El asedio al Alcázar de Toledo. Resistencia a ultranza
Después del golpe del 17 de julio, las tropas de África al mando del general Yagüe lograron cruzar el Estrecho de Gibraltar con la intención de iniciar una larga marcha hacia el norte y tomar Madrid, pero la resistencia de los soldados de la República fue más intensa de lo que en un principio se había esperado. Poco a poco, las ciudades y pueblos de la Baja Andalucía y Extremadura que no se habían unido al Alzamiento cayeron en manos de los sublevados.
El hundimiento del Baleares. El desastre del buque insignia de Franco
Hasta principios de 1938, la flota gubernamental había demostrado una cierta falta de iniciativa, dejando el dominio del mar en manos de la flota franquista, muy inferior en número pero que utilizaba sus unidades con gran voluntad ofensiva y eficacia. Esta situación provocó un exceso de confianza en algunos de sus mandos, que estaban convencidos de la incapacidad técnica del adversario.
¿Guerra del Francés o guerra de la Independencia?
En 1807, so pretexto de conquistar Portugal, que, aliada con Inglaterra, se negaba a colaborar en el bloqueo al que pretendía someter Napoleón a las Islas Británicas, atravesaron los Pirineos desde Francia las tropas napoleónicas, con un inconfesado proyecto para España que les hizo quedarse en su territorio y tomar posiciones, también en la mismísima capital. Siete meses después, el 2 de mayo de 1808, Madrid se levanta: es el inicio de la guerra del francés o francesada, conocida generalmente, sin embargo, como guerra de la Independencia.
La batalla de Alcántara
Tras la muerte sin descendencia de Sebastián I de Portugal en 1578, las Cortes proclamaron rey a su tío abuelo Enrique. Todo legal, pero con un pequeño problema: Enrique era cardenal de la Iglesia católica. Felipe II, que era hijo del emperador Carlos y de Isabel de Portugal, vio claramente la oportunidad de sumar un nuevo reino a su monarquía. Cuando el cardenal solicitó a la Santa Sede permiso para dejar la curia y tener descendencia, esta, presionada por el monarca español, se lo denegó.
Lezo en Cartagena. Cartografía y evolución de la defensa de Cartagena de Indias
«Lo que define a las plazas fuertes no son las murallas sino la gente de guerra, y por muy fuertes que fueren los muros, si no tienen la gente suficiente, son inútiles».
Fernando Álvarez de Toledo, Gran Duque de Alba