La mal denominada «guerra de Marruecos» o segunda guerra de Marruecos, enfrentó al ejército español en los albores del siglo xx frente a grupos de guerrilleros pertenecientes a diferentes tribus rifeñas en la zona norte de África. En un contexto europeo de expansión colonial, incluso de carrera colonial, en el cual las diferentes potencias europeas se vieron inmersas en un intenso frenesí de locura expansiva, repartiéndose el continente africano a través de diversos tratados, España se vio abocada, casi en la obligación, de tomar parte en el reparto colonial.