Isidoro de Sevilla, de donde era Obispo, natural de Cartagena, en su Laus Hispaniae (siglo vii), o en sus Etimologías, primera enciclopedia occidental, once siglos antes que la francesa, habla de la Hispania romana y la primera unificación política peninsular (incluida la actual Portugal) visigoda, fuente de la legitimación que buscaban para la comunión de la sociedad peninsular hispanorromana, proclamándose totus Hispaniae rex.